Siempre "enreando", siempre siendo justo, separando lo importante de lo que no lo es, ese “estoy de acuerdo con todo pero discrepo" con el que nos sacaba una sonrisa en el momento justo no se apaga, ni queda en deshuso, lo llevamos con nosotros, para recordarlo cuando queramos recurrir a él.
Ni dejarán de crecer grandes y preciosas setas, pero ninguna va a tener la suerte de caer en su canasto y acompañarlo en esas caminatas de otoño por el campo.
Si existen tres grupos de personas, los que hacen las cosas, los que dicen lo que hay que hacer y los que critican a los que hacen, pertenece al primer grupo, al de los que hacen, así, en primera fila, compañero de calle de cualquiera que necesite ayuda. Y no diciendo lo que hay que hacer, sino enseñando como se hacen las cosas bien hechas.
Hablando en silencio, y diciendo más verdades que cualquiera, más nueces que ruido.
Su dedicación a intentar lograr una vida digna para los demás no queda en saco roto, cuando las causas justas se consiguen, no las llegan a ver todos los que han luchado por ellas, pero que gracias a su esfuerzo hacen posible que los que quedan las puedan disfrutar.Con todas las lágrimas que ha hecho resbalar por las caras incrédulas, se formará una marea que empuje con fuerza para que por lo que ha luchado pueda ser verdad algún dia. Una vida más igualitaria y justa para los más desfavorecidos, más justa para los que les niegan derechos básicos, más justas para las personas mayores y pensiones más acordes a la realidad, unos sueldos más justos, o una sanidad pública... donde no falte personal. Una última lección práctica para que se nos quede bien aprendido que para hacer las cosas bien, y en cuestión de recortes, la sanidad no se toca!
Ya nos ha "enreao" para que seamos parte de esa marea que no pare de empujar hasta que se consigan estos logros. La marea de lágrimas está en marcha!
Seguro que estarás de acuerdo con todo esto,aunque discrepas
Jose Barbecho , de Podemos Almodovar del Río
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